Hace unos 60 años, un andaluz huérfano se enamoro de la mujer de su vida gracias al trabajo que desempeñaba para el padre de ésta. Unos años mas tarde y tras el sufrimiento de algún que otro aborto, nació el primer hijo. Ese niño que vivió su infancia y pubertad en un pequeño pueblecito de Córdoba hasta que la familia tuvo que emigrar a Zaragoza, porque en Andalucía no había futuro, cuando contaba con 14 años. Fueron años duros pero consiguieron salir adelante y labrarse un futuro en la capital aragonesa. Años mas tarde, se enamoraría de la mujer de su vida y tendrían tres preciosas niñas, aunque la mas preciosa sea la pequeña.
¡Muchísimas felicidades Papa!
Te quiero muchísimo.
Te quiero muchísimo.
Los padres :) hay que cuidarlos mucho!
ResponderEliminarCreí que habías desaparecido...
EliminarLos padres son nuestra base, nuestro punto de apoyo y referencia, sin duda:)