Enamorarse poco a poco.

¿Sabes cuando vas a una ciudad una y otra vez y no te cansas de visitarla?

Exacto, se ha ganado un huequecito en tu corazón.

 Y bueno, yo hasta la primera vez que visite Madrid era de playa, del Sur y del Norte, de extremos, de calles con flores o de prados verdes... Pero bueno, visite Madrid haya por el 2006 y me fui enamorando poco a poco de ella, fue algo irremediable. 

Pero sin duda, de este mini viaje me quedo con mi paseo en solitario por el centro (Sol, Plaza Mayor, Opera, el Palacio Real y el Templo de Debod) una calurosa tarde de Julio y sin duda alguna, de este concierto ''gratis'' que pudimos disfrutar mi señor padre y yo esa misma tarde. 

La mejor voz que he disfrutado jamas (y mira que me gustan artistas). Que potencial y que energía. Una pena que los que pasaban por plena calle Preciados no supieran disfrutar de semejante voz. Se perdieron un espectáculo magnífico. 

Madrid, siempre vuelvo a ti.