Un año y 4 días.

Y parece que fue ayer cuando recibí una de las mejores noticias: era universitaria, sin tener que desplazarme de ciudad y lo que quería estudiar. 

Ya hace un año que soy pre-educadora. 

¿Y la verdad? ¡No cambio mi elección! 

Amo, adoro, quiero y me encantan los niños.

Y bueno, no es sólo eso porque sino sería niñera o madre y no educadora; también me gusta la idea de saber que una parte de su vida, aprendizaje y educación va a depender de mi y eso me hace esforzarme, aprender y querer ser mejor para poder lograr ser una gran maestra educadora. 

Ahora solo quedan como 7 años para ejercer de Maestra de Infantil. 

¿''7'' años? Sí, 3 de carrera, oposiciones y buscarse las castañas del fuego.

Pero NO me arrepiento, poco a poco voy alcanzando uno de mis múltiples sueños.

Y a por los demás.